DECLARACIÓN DE LA RENTA
La X es para los pobres
Es tiempo de hacer la renta. Nos disponemos a poner o no poner la x en la casilla de aportación a la Iglesia Católica. Aquí se puede hacer lo que uno quiera, pero mis argumentos valen tanto como los contrarios. Por tanto, déjenme que los exponga. No pertenezco a la Iglesia a la que amo por razones folclóricas. Ni siquiera me atraganto al decir que mi fe es regalada.
No estoy acá, en este mundo, para ponerme medallitas de santitos o medallitas de buena persona. No me interesa esa militancia ciega y oscura. Luz y colores para la realización de una vida plena. La que me gustaría conseguir. Me duele y me fascina mi Iglesia. Claro que me duele. Me duele porque la devoción y el amor traen eso. Porque a veces cuesta comprender cosas. Pero sólo la comprensión por lo espiritual lo compensa todo.
No pertenezco a la Iglesia para salvarme. No depende de mí. Pertenezco para intentar "amar al prójimo como a ti mismo". Estoy aquí para ver que lo que por fe se estructura, por fe se recrea. No pertenezco a la Iglesia militante, sino a la Iglesia triunfante.
Se alzan voces de justicia social. Pero cuando la que realiza la justicia social es la Iglesia, entonces, se pone en cuarentena. Es más fácil deslegitimar la ayuda a los demás si se realiza desde la fe. Como si ayudar porque se cree, fuese menos que ayudar por solidaridad. Como si la solidaridad no fuese lo mismo desde la religiosidad. Como si la fraternidad se ahoga en el momento en el que el componente religioso hace acto de presencia. Estamos intoxicados. No nos interesa la ayuda si se realiza desde la convicción religiosa. Cuesta legitimar la ayuda si es eclesial. ¿Por qué? No lo entiendo. No acabo de comprender ese sesgo ideológico que hace de la caridad una actividad o una reflexión ajena a la humanidad.
No hay suficiente espacio en este artículo para contarles las cosas que se hacen desde la Iglesia para los más desvaforecidos, para los harapientos, para los sin techo, para los desheredados, para los abandonados. Papá Estado quiere llegar a ellos, y no llega. Porque si llegase, la Iglesia no estaría en eso, o sí. Está porque se necesita. Está porque la mayor parte de ancianos sin familia están bajo el manto protector de monjas de la caridad. Está porque la gran mayoría de gente sin recursos va a Cáritas a recibir comida y dinero para no perder la dignidad.
Y en Cáritas a nadie se le pregunta a quién vota, qué opina del cambio climático o qué fe tiene, si es que la tiene. Está porque España es el país que más misioneros tiene repartidos por el mundo, en ese mensaje de globalización de la caridad. Está porque el padre Ángel recoge niños abandonados en la calle como Mensajeros de la Paz y el padre Patera recoge niños, musulmanes la gran mayoría, abandonados a su suerte en barquitos de papel. Está donde el sufrimiento por la droga ahoga a tantas familias con Proyecto Hombre. Está y se siente.
Hay una parte de esa progresía caduca y nostálgica que rememora cantos de antigua raigambre. Que es capaz de citar textos religiosos de hace un siglo para deslegitimar la labor de la Iglesia. O hacer mofa de costumbres no compartidas ya. Si es que se os ve venir. Hay una cierta progresía que achucha para que se financie la cultureta. Financiación al cine español, vaya o no la gente al cine. Les mola que se financie la butaca del deleite con palomitas y pasan de que se financien proyectos de la Iglesia para los más pobres. Si es que se os ve. O sea, que esto es la izquierda. Pues no, camaradas.
No va ser que porque la Iglesia solicite subvenciones para ayudar a los demás, sea más injusto que pedir dinero para el cine español. Lo ve. No se trata de a dónde va el dinero. Se trata de que si usted es capaz desde su visión estatalista de la cultura, de pedir pasta gansa para el deleite cultural, por lo menos tenga la decencia de dejar que las actividades que se organizan desde la Iglesia para los que nadie quiere, sean subvencionadas en la misma justicia social. Si hay dinero para el cine, los conciertos, los librosÉ ¿Por qué se cuestiona que haya dinero para Cáritas, Proyecto Hombre, Banco de Alimentos, Madre Teresa de Calcuta? Para todos, o para ninguno. Pero no sean sectarios.
Yo pondré la X porque creo que parte de mis impuestos deben de ir a los más pobres. Y la Iglesia les llega. Aunque a unos cuantos no les guste que lo hagan por fe. O no les guste que lo hagan por Jesús de Nazaret. Pero, ¡qué tontería tener la escopeta cargada contra la gente que ayuda a otros! Esa no es la izquierda. La izquierda de verdad también pone la X. Gracias
